Las principales marcas de moda ponen mucho empeño en que sus tiendas sorprendan tanto como sus propias creaciones, y es por eso que algunas se han vuelto ya verdaderos íconos de la arquitectura moderna.
1. Louis Vuitton Maison, Osaka
Moda y arquitectura siempre han sido dos formas de expresión artística intrínsecamente relacionadas, y esto es algo que entiende perfectamente Louis Vuitton, quien ha contado en numerosas ocasiones con algunos de los más prestigiosos estudios de arquitectura para dar forma a sus espacios.
Su tienda en Osaka (Japón) diseñada por el japonés Jun Aoki tiene el sello interiorista del reconocido Peter Marino. El edificio, inspirado en las velas de los tradicionales barcos mercantes japoneses, rinde honor a la cultura nipona y tiene incluso un espacio de restauración.
2. Casa Dior, Seúl, Corea del Sur
Diseñada según las propias creaciones de la firma, la tienda de Dior en Seúl nació con el propósito de evocar la toile de uno de sus conocidos vestidos. Diseñada por el arquitecto –y ganador de un premio Pritzker- Christian de Portzamparc, es una de las edificaciones de carácter escultórico más icónicas de la ciudad.
3. Dior, Tokio
Puro minimalismo japonés, así es la tienda insignia de Dior en Tokio. Una edificación para la que la firma de lujo contó con el talento creativo de SANAA, una de las parejas de arquitectos más aplaudidas de los últimos años.
El dúo japonés diseñó una fachada de vidrio de 30 metros de altura con pantallas de acrílico tras las que se intuye el interior del edificio. Un juego de semitransparencias que convierte la visita en toda una experiencia visual.
4. Hermès, Rive Gauche, París
En 2010 Hermès inauguró por primera vez una tienda en el popular barrio de Saint-Germain-des-Prés en París, y lo hizo en un edifico que hasta los años 30 tenía una antigua piscina. Respetando al máximo la esencia del edificio, el estudio francés RDAI, creó un interior con varias estructuras de madera que funcionan a modo de expositores en esta particular tienda-museo.
5. Fundación Prada, Milán
El estudio OMA ha dirigido desde sus orígenes el proyecto de la Fundación Prada en Milán. El conjunto, localizado en una antigua destilería de 1910, está formado por varios edificios en los que se desarrolla un programa cultural que atrae cada año a diseñadores, arquitectos y artistas de todo el mundo.
La colección permanente de arte de la firma se puede ver en esta particular “casa encantada” cubierta totalmente por pan de oro.
6. Chanel Mobile Art, París
Este es un pabellón itinerante en el que se encuentran obras de artistas contemporáneos inspiradas en la maison francesa. Una estructura desmontable de 700m² que, tras hacer escala en Hong Kong, Tokio y Nueva York, llegó para quedarse definitivamente en la explanada del Instituto del Mundo Árabe (IMA) de París.
7. Prada, Marfa, EE.UU.
Es probablemente la tienda más popular e icónica del mundo, pero allí no se vende nada, ni siquiera es una tienda. La instalación es una obra de arte diseñada por los arquitectos escandinavos Ingar Dragset y Michael Elmgreen como una crítica a la industria del lujo.
Sin embargo, este experimento para el que la propia Miucci Prada dio su consentimiento escogiendo incluso los productos expuestos en su interior, pronto se volvió un estandarte de la propia industria.
Paradojas de la vida, este es un buen ejemplo de cómo la arquitectura puede transformar una marca en todo un símbolo. O incluso, en un sitio de peregrinaje. Bien por Prada.
Yuniet Blanco Salas
